El menisco es un cartílago en forma de C en la rodilla. Funciona como un amortiguador entre los huesos superior e inferior de la pierna. Un desgarro de menisco se trata primero con reposo, hielo, medicamentos y fisioterapia. Si esos tratamientos no funcionan, quizás sea necesario realizar una cirugía.

Siga estas instrucciones para cuidar a su hijo.

Siga las recomendaciones del ortopedista de su hijo sobre lo siguiente:

• Si su hijo puede soportar peso en la rodilla.
• Qué movimientos (como ponerse en cuclillas y girar) y deportes debe evitar su hijo.
• Si su hijo debe usar un aparato ortopédico o muletas.
• Si debe hacer algún ejercicio o ir a fisioterapia.

Para ayudar con el dolor y la inflamación:

• Cuando su hijo esté sentado, eleve la pierna sobre una silla. Cuando esté acostado, eleve la pierna sobre una almohada.
• Envuelva hielo en una toalla y colóquelo sobre la rodilla durante aproximadamente 15 minutos unas pocas veces al día.
• Envuelva la rodilla de su hijo con un vendaje elástico de compresión.
• Dele a su hijo ibuprofen (Advil®, Motrin® o la marca de la tienda) o naproxen (Naprosyn®, Aleve® o la marca de la tienda) según lo que haya indicado el ortopedista.

Su hijo:

• tiene inflamación y dolor que empeoran
• tiene chasquidos en la rodilla, la rodilla trabada, bloqueada (dificultad para enderezarla completamente) o bien se le afloja (colapsa de pronto)
• siente que se le entumecen la pierna, el pie o los dedos o siente un hormigueo

¿Cómo ocurre el desgarro de meniscos en niños y adolescentes? En niños y adolescentes, el desgarro de menisco suele ocurrir cuando se tuerce o gira la rodilla mientras se pone el peso sobre ella; por ejemplo, al aterrizar después de un salto o cuando se realiza un cambio brusco de dirección. También puede ocurrir cuando alguien se cae o se golpea la rodilla. Los desgarros de meniscos a menudo aparecen junto con otras lesiones de la rodilla, como cuando se rompe un ligamento (bandas gruesas de tejido que ayudan a mantener las articulaciones juntas).

¿Cuáles son los síntomas de un desgarro de menisco? Los síntomas de un desgarro de menisco varían y pueden incluir:

• dolor, inflamación o rigidez en la rodilla
• problemas para cargar peso en la rodilla lesionada
• rodilla "trabada" o "con chasquidos"
• rodilla que cede o se afloja

A veces, un menisco desgarrado no causa síntomas, por lo tanto, la persona no sabe que tiene un desgarro. O tal vez tenga síntomas al principio que mejoran con el tiempo y el tratamiento.