La otitis externa es la inflamación e irritación del canal auditivo. Suele deberse a una infección con bacterias (un tipo de germen). El tratamiento con gotas para los oídos ayuda a que la mayoría de los niños se sientan mejor en unos pocos días.

Uso de gotas para los oídos
- Aun cuando los síntomas desaparezcan, es importante darles los medicamentos durante la cantidad total de días indicada. De lo contrario, la otitis externa podría volver a aparecer.
- Antes de usar las gotas:
- Lávese las manos con agua y jabón. Séqueselas con una toalla limpia.
- Si en el canal auditivo hay sangre o pus de color amarillo o blanco, hable con el profesional del cuidado de la salud para ver si puede administrarle las gotas. Si puede ponerle gotas, limpie la parte exterior del oído con un paño limpio. No ponga nada dentro del canal auditivo del niño para limpiarlo.
- Frote el frasco del medicamento entre las palmas de las manos o colóquelo en un lugar cálido para entibiar las gotas si el medicamento se conservó en el refrigerador.
- Para colocar las gotas:
- Haga que su hijo se recueste de costado con el oído en el que debe colocar las gotas hacia arriba. Si su hijo necesita ayuda para mantenerse quieto, pídale ayuda a alguien.
- Con suavidad, tire de la oreja hacia afuera y hacia arriba, o hacia abajo, hasta que pueda ver bien el canal auditivo. Afirme la mano que sostiene el gotero, colocando la muñeca sobre la mejilla o la cabeza de su hijo.
- Aplique la cantidad correcta de gotas en el canal auditivo del niño sin que el gotero toque ninguna parte del oído o la oreja.
- Haga que el niño permanezca de costado durante 5 minutos y frote suavemente la piel que está adelante de la oreja para ayudar a que las gotas penetren en el canal auditivo.
- Antes de que el niño se levante, coloque suavemente un trozo de algodón en el canal auditivo para evitar que el medicamento se salga.
- Enjuague la punta del gotero con agua del grifo y vuelva a tapar el frasco de inmediato.
- Lávese las manos.
- Guarde el medicamento de forma segura, fuera del alcance de los niños.
Si su hijo siente dolor
- Pruebe de colocarle compresas tibias sobre el oído.
- Si el profesional del cuidado de la salud se lo permite, puede darle acetaminophen (como Tylenol® o la marca de una tienda) o ibuprofen (como Advil®, Motrin® o la marca de una tienda). No les dé ibuprofen a los bebés menores de 6 meses de edad.
El cuidado de los oídos de su hijo
- Su hijo no debe mojarse los oídos hasta que haya terminado con el medicamento y haya desaparecido el dolor. Para mantener secos los oídos:
- Mientras se duche o tome un baño, el niño debe colocarse con cuidado una pequeña bola de algodón cubierta con vaselina (marca como Vaseline® o la marca de una tienda) o usar una gorra de baño que le cubra las orejas.
- Su hijo debe evitar la natación y otras actividades acuáticas durante las cuales pueda entrarle agua en los oídos.
- Su hijo no debe usar auriculares (los que se colocan dentro del oído) hasta que termine todo el medicamento y el dolor desaparezca.

¿Cuáles son los signos de la otitis externa? Los niños con otitis externa suelen tener dolor y picazón en el canal auditivo. Tal vez tengan la sensación de tener los oídos tapados debido a la hinchazón y sientan que no escuchan tan bien como siempre. Es posible que le salga líquido del oído.
¿Cuál es la causa de la otitis externa? La otitis externa suele ocurrir porque la piel del canal auditivo se daña y permite que crezcan bacterias. Esto puede ocurrir debido a lo siguiente:
- nadar mucho (la otitis externa a veces se denomina "oído de nadador").
- rascarse el canal auditivo con una uña o un hisopo de algodón
- usar audífonos, auriculares y tapones para los oídos
- irritación de la piel por alergias o eccema
- una infección del oído medio que drena líquido en el canal auditivo
¿Cómo puedo evitar la otitis externa? Estos consejos pueden ayudar a proteger a los niños de contraer otitis externa:
- No colocar hisopos con punta de algodón ni otros objetos en los oídos.
- Solo dejar que el niño nade en piscinas que se mantengan limpias y que se revisen regularmente en busca de bacterias.
- Evitar nadar en ríos, lagos o estanques con niveles elevados de bacterias. Verifique los carteles que indiquen los niveles de bacterias y si es seguro nadar.
- Después de nadar o bañarse:
- Hacer que los niños inclinen la cabeza hacia un lado para ayudar a que el agua drene.
- Seque el oído externo con una toalla.
- Use un secador de cabello en el ajuste más bajo de calor a una distancia mínima de 12 pulgadas (30 centímetros) del oído para ayudar a secar el canal auditivo.
- Si el profesional del cuidado de la salud se lo recomienda, los niños pueden hacer lo siguiente:
- Usar tapones para los oídos o una gorra de natación para nadar.
- Usar gotas para los oídos de venta sin receta, como Swim-EAR®, Auro DRI® o la marca de una tienda, después de nadar. Estas gotas no deben usarse si su hijo tiene tubos en los oídos o un orificio en el tímpano.