Los calambres musculares son una contracción dolorosa de un músculo y pueden durar de unos pocos segundos a unos pocos minutos. Con frecuencia, ocurren al hacer ejercicio físico o después del ejercicio. También pueden ocurrir al usar un músculo en particular (por ejemplo, un calambre en un dedo al tipear). El descanso, los estiramientos y beber más líquido ayudan a aliviar la mayoría de los calambres musculares. A continuación, encontrará cómo cuidar a su hijo mientras se recupera de los calambres musculares y formas de prevenirlos.

Mientras su hijo se recupera de los calambres musculares:
- Pídale que descanse el músculo acalambrado durante unas pocas horas.
- Asegúrese de que beba abundante líquido. Siga las recomendaciones del profesional del cuidado de la salud sobre lo que debe beber su hijo (agua, solución de rehidratación oral o bebidas deportivas) y sobre las cantidades. En general, si la orina es de color amarillo claro, el niño está bebiendo suficiente líquido.
- Procure que tome los suplementos o vitaminas tal como se lo recomiende el profesional del cuidado de la salud.
- Ayúdelo a evitar la cafeína, que elimina el agua del cuerpo a través de la orina.
- Ofrézcale la dieta habitual.
- Si a su hijo le duele el músculo debido a los calambres, puede probar lo siguiente:
- masajear suavemente el músculo y estirarlo
- hacer que su hijo se dé un baño con agua caliente
- usar una almohadilla térmica
- colocar hielo envuelto en una toalla
- ayudar a su hijo a relajarse (por ejemplo, con respiraciones profundas o meditación)
- darle medicamentos como acetaminophen (Tylenol® o la marca de una tienda) o ibuprofen (Advil®, Motrin® o la marca de una tienda) si el profesional del cuidado de la salud se lo permite. Siga las indicaciones del prospecto sobre la dosis y la frecuencia adecuadas.
Para ayudar a prevenir los calambres musculares, anime a su hijo a hacer lo siguiente:
- Beber mucho líquido. Beber agua suele ser suficiente para que los niños estén hidratados. Los profesionales del cuidado de la salud recomiendan que los niños que practican deportes de resistencia (como fútbol americano, correr, tenis o fútbol) o que hacen ejercicio físico en clima caluroso beban líquidos con sal (como las soluciones de rehidratación oral o las bebidas deportivas) y que les agreguen sal a las comidas. Pregúntele al profesional del cuidado de la salud cuál es la cantidad adecuada de sal para su hijo.
- Evitar la cafeína.
- Tomar suplementos o vitaminas tal como se lo recomiende el profesional del cuidado de la salud.
- Precalentar y estirar antes de empezar a hacer ejercicio físico. Hacer estiramientos después del ejercicio físico.
- Vestirse con prendas de color claro y usar solo la cantidad mínima de equipo necesaria para mantenerse seguro al hacer ejercicio físico cuando hace calor. Por ejemplo, en un entrenamiento de fútbol americano, si se corre para mejorar la resistencia, los niños se pueden quitar el casco y las protecciones.

¿Cuáles son las causas de los calambres musculares? No se sabe con exactitud por qué ocurren los calambres musculares. Es posible que se deban a diferentes razones en distintas personas. Por ejemplo:
- no beber la cantidad suficiente de líquido
- no ingerir una cantidad suficiente de sal en la dieta
- perder mucha sal a través del sudor
- usar músculos que no se usan habitualmente
- un mensaje que el cerebro envía cuando los músculos están cansados
¿Qué debo hacer si mi hijo vuelve a tener calambres? Haga lo siguiente para ayudar a su hijo:
- Si está haciendo actividad física o practicando un deporte, haga que se detenga para que pueda descansar el músculo.
- Si se encuentra en un ambiente caluroso, llévelo a un lugar fresco, si es posible. O puede colocarle compresas de hielo envueltas en una toalla sobre la piel para enfriarla.
- Le puede ayudar lo siguiente:
- Darle una cantidad abundante de agua. Pregúntele al profesional del cuidado de la salud si debe darle bebidas deportivas u otra bebida que contenga sal.
- Animar a su hijo a relajarse y a respirar hondo.
- Masajear o estirar el músculo acalambrado.
- Colocar una almohadilla térmica o hielo envuelto en una toalla sobre el músculo acalambrado.
- Hacer que su hijo se dé un baño con agua caliente.