(Sunburn: How to Care for Your Child)
Las quemaduras de sol son un enrojecimiento doloroso de la piel que ocurre por estar expuesto al sol durante demasiado tiempo. También pueden aparecer al usar una cama solar. El enrojecimiento es más difícil de notar en los niños con piel más oscura. La piel quemada también puede estar inflamada o con ampollas.
Los síntomas de una quemadura de sol desaparecen gradualmente, pero las quemaduras de sol pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de piel y causar otros problemas. Por eso, es importante que los niños y los adolescentes protejan su piel del sol.


Para ayudar a su hijo a sentirse más cómodo mientras se curan sus quemaduras de sol:
Proteja la piel del sol:
Si su hijo toma medicamentos que lo aumentan su sensibilidad al sol, hable con el profesional del cuidado de la salud sobre las precauciones especiales que debe tomar.

Su hijo:

¿Cómo ocurren las quemaduras de sol? Los rayos ultravioleta (UV) del sol reaccionan con una sustancia química de la piel llamada "melanina". Las quemaduras de sol ocurren cuando el nivel de exposición a los rayos UV es superior a la protección de la melanina de la piel. Cuanto más tiempo se exponga al sol una persona, más fuerte será la luz del sol y mayor será el riesgo de una quemadura de sol.
¿Qué otros problemas pueden causar los rayos UV? Además de quemaduras de sol, los rayos UV pueden provocar cáncer, cataratas y envejecimiento prematuro de la piel. Aun en días nublados o fríos, los rayos UV del sol pueden causar daño. Las pantallas solares bloquean los rayos UV.
¿Los niños con piel oscura están protegidos contra las quemaduras de sol? Cuanto más claro sea el color natural de la piel de un niño, menor será la cantidad de melanina que tiene para absorber los rayos UV y protegerse. Los niños con la piel más oscura tienen más melanina. Pero sin importar cuál sea el tono de piel, todos los niños necesitan protegerse de los rayos UV porque cualquier tipo de bronceado o quemadura causa daños en la piel.