El dolor en la rodilla puede deberse a diferentes motivos y puede aparecer lenta o repentinamente. Con frecuencia, el dolor en la rodilla no es grave y desaparece en unas pocas semanas con reposo y cuidados básicos en el hogar.

• Su hijo debería dejar por un tiempo las actividades que le provocan dolor o que lo obligan a esforzar la rodilla, como correr, bailar, practicar artes marciales y saltar. Su hijo puede practicar ejercicios de bajo impacto (como natación o ciclismo) si no le causan dolor.
• Pregúntele al profesional del cuidado de la salud:
  • Cuándo su hijo puede retomar los deportes. Cuando lo haga, asegúrese de que use calzado deportivo con buen agarre y la protección correspondiente para los deportes específicos.
  • Si su hijo debe hacer estiramientos o ejercicios, o visitar a un fisioterapeuta.
  • Cuándo debe volver su hijo para una visita de seguimiento.
• Si su hijo tiene malestar y el profesional del cuidado de la salud se lo recomienda, puede darle acetaminophen (marcas como Tylenol® o la marca de una tienda) o ibuprofen (marcas como Advil®, Motrin® o la marca de una tienda).
• Para aliviar la inflamación:
  • Coloque una compresa fría sobre la rodilla durante 15 a 20 minutos cada 3 o 4 horas. Coloque una toalla o un paño entre la compresa fría y la piel.
  • Mantenga la pierna elevada siempre que sea posible.

Su hijo:

• continúa con dolor en la rodilla después de seguir las instrucciones de cuidado
• comienza a tener dolor o inflamación en la rodilla, o el dolor o la inflamación que ya tenía empeoran
• tiene dolor que lo despierta durante la noche más de una vez cada tanto
• tiene dificultad para caminar
• tiene otros síntomas (como fiebre o sarpullido, o si la rodilla se ve roja)

¿Cuáles pueden ser las causas del dolor en la rodilla? El dolor puede deberse a una lesión, irritación o inflamación en cualquier parte de la articulación de la rodilla (como en los huesos, los músculos, los tendones o los ligamentos). Si el dolor en la rodilla no desaparece con reposo y tratamiento en el hogar, los profesionales del cuidado de la salud tal vez hagan algunas pruebas o envíen al niño al ortopedista (médico especializado en los huesos).