La laringoscopía es un procedimiento que los profesionales del cuidado de la salud realizan para ver el interior de la laringe, que se encuentra debajo de la parte posterior de la garganta. En la laringoscopía directa, se utiliza un instrumento llamado laringoscopio para observar la laringe directamente.

Su hijo recibió anestesia general durante el procedimiento. Esto significa que su hijo no sintió el laringoscopio y no recordará el procedimiento.

Su hijo estuvo en observación después del procedimiento y ya puede cuidarlo en su casa.

Es posible que su hijo se sienta cansado y tenga dolor de garganta, náuseas, dolores musculares generalizados o escalofríos durante uno o dos días. Si se realizó una biopsia, su hijo tal vez escupa una pequeña cantidad de sangre durante el día posterior al procedimiento. Esto es normal.

• Dele a su hijo los medicamentos recetados como se lo hayan indicado.
• Los niños mayores de 4 años pueden chupar pastillas para la garganta o caramelos duros para ayudar a aliviar el dolor.
• Las gárgaras con agua y sal también pueden ayudar a aliviar el malestar en la garganta.
• Comience a darle líquidos y alimentos blandos, como puré de papas. Vuelva a una dieta normal cuando su hijo pueda tolerarla.
• Si su hijo está molesto y el médico no le recetó un analgésico, puede darle acetaminophen (Tylenol® o la marca genérica de una tienda). Evite los medicamentos antiinflamatorios como ibuprofen (Advil®, Motrin® o la marca genérica de una tienda), naproxen (Aleve® o la marca genérica de una tienda) y aspirina, porque pueden aumentar el riesgo de hemorragia. 
• Vaya a todas las visitas de seguimiento tal como se lo recomienden para que el médico pueda asegurarse de que su hijo se está recuperando bien.

Su hijo:

• tiene fiebre superior a los 101 °F (38.3 °C)
• no puede retener alimentos
• no puede comer ni beber
• tiene ronquera durante más de una o dos semanas
• escupe sangre después del primer día
• hace ruido al respirar

• Su hijo tiene problemas para respirar.
• La piel entre las costillas y el cuello de su hijo se tensa al respirar.
• A su hijo le sale mucha sangre por la boca.

¿Cuáles son los tipos de laringoscopios? Para las laringoscopías directas, se utilizan dos tipos de laringoscopios:

• Laringoscopía rígida: El profesional del cuidado de la salud utiliza un laringoscopio rígido, que no se flexiona. Este instrumento se introduce a través de la boca del niño hasta la garganta. Además, ilumina el interior de la garganta y amplía la imagen. En general, esto se hace con el niño bajo anestesia general. El procedimiento puede ayudar al profesional del cuidado de la salud a quitar objetos extraños o crecimientos de tejido, recolectar muestras de tejido para examinarlas en un laboratorio o realizar un tratamiento con láser.

• Laringoscopía flexible: El profesional del cuidado de la salud utiliza un tubo delgado y flexible que se introduce a través de la nariz o la boca. El tubo cuenta con una luz y una cámara en uno de los extremos y esto permite que el profesional del cuidado de la salud vea la garganta a través de un visor del laringoscopio o en un monitor en la sala. En general, esto se hace en un consultorio o una clínica con el niño despierto y se usa un medicamento para adormecer la garganta. A veces, se hace con el niño bajo anestesia general. El procedimiento puede ayudar al profesional del cuidado de la salud a diagnosticar problemas en la garganta y la laringe.