Los profesionales del cuidado de la salud realizan un estudio del sueño (también llamado "polisomnografía") para comprender cómo duerme un niño. La mayoría de los estudios del sueño se realizan durante la noche, en una habitación privada que está a oscuras y en silencio. Hay una cama para el niño (o una cuna si se trata de un niño pequeño) y una cama o un catre para el padre o el encargado de cuidarlo. En el lugar habrá un especialista en sueño que preparará el equipo y responderá sus preguntas.

Su hijo usará sensores conectados a cables en la cabeza, la nariz, la boca, el pecho, el abdomen, los dedos y las piernas. El técnico los sujetará con adhesivos, cinta o una pasta. Los sensores miden la respiración, la cantidad de ciertos gases (oxígeno y dióxido de carbono) en el cuerpo, cómo late el corazón, los movimientos del cuerpo y las ondas cerebrales. Esta información se envía a una computadora. El niño permanecerá con los sensores hasta que se despierte por la mañana. Una vez terminado el estudio, se quitan fácilmente.

También hay un micrófono para grabar sonidos y una cámara para registrar el sueño de su hijo.

Usted y su hijo regresarán a casa temprano por la mañana, una vez que haya terminado el estudio.

• El niño debe estar acompañado durante toda la noche por uno de sus padres o un tutor. 
• Hable con su hijo acerca del estudio del sueño unos días antes del estudio. Use palabras sencillas para explicarle lo que ocurrirá. Dígale a su hijo lo siguiente:
  • El estudio del sueño no causa dolor.
  • No habrá ninguna aguja.
  • Uno de los padres (o tutor) estará con él todo el tiempo.
  • Puede traer su cobija o su juguete favorito para dormir.
  • Si necesita ir al baño, alguien lo ayudará para que los cables no se enreden.
• Empaque los elementos que usted y su hijo necesitarán para la noche, como los siguientes.
  • Pijamas y pantuflas
  • Un cepillo de dientes, pasta de dientes e hilo dental.
  • Libros, música u otras actividades tranquilas para ayudar a su hijo a relajarse
  • Cualquier elemento especial con el que a su hijo le guste dormir, como una cobija, un peluche o una almohada.
• Si su hijo usa equipos o suministros médicos, o toma algún medicamento por la noche, tráigalos consigo. Pregunte al profesional del cuidado de la salud si su hijo debe usar el equipo y tomar los medicamentos como de costumbre.
• El día del estudio, haga lo siguiente:
  • Lávele el cabello a su hijo. No utilice gel, mousse, aerosoles o lociones.
  • Dele de cenar a su hijo antes de ir al lugar donde se hará el estudio del sueño.
  • El día del procedimiento, su hijo no debe tomar bebidas con cafeína (refrescos, café, té) ni tomar nada que contenga chocolate después del mediodía.
  • No permita que su hijo tome una siesta.

• Si su hijo tiene fiebre, tos, congestión nasal o cualquier otro problema de salud antes del estudio del sueño, comuníquese con el centro del sueño. Los estudios del sueño se deben hacer cuando los niños están en su estado de salud habitual; por lo tanto, si el niño está enfermo, se reprogramará.
• Tiene alguna pregunta sobre el próximo estudio del sueño.

¿Por qué se realizan los estudios del sueño? El estudio podría revelar algunos problemas de sueño como los siguientes:

• Apnea obstructiva del sueño (cuando la respiración de alguien se bloquea temporalmente durante el sueño)
• Trastorno del movimiento periódico de las extremidades (calambres y sacudidas en las piernas durante el sueño)
• Narcolepsia (un problema con el ciclo sueño/vigilia)
• Hipersomnia (cansancio extremo durante el día)